Los Pop Rocks están hechos de azúcar, jarabe de maíz, bicarbonato de sodio y saborizantes. Cuando se colocan Pop Rocks en un refresco, el bicarbonato de sodio reacciona con el ácido del refresco, provocando una liberación de dióxido de carbono. Este gas forma burbujas que suben a la superficie del refresco, creando el familiar efecto burbujeante.
El tipo de refresco puede afectar la reacción entre los Pop Rocks y el refresco. Algunos refrescos, como la cola, contienen una mayor concentración de ácido que otros, como la cerveza de raíz. Esto significa que la reacción entre los Pop Rocks y la cola será más intensa, lo que dará como resultado más burbujas y un efecto burbujeante más fuerte.
Además, el sabor del refresco también puede afectar la reacción entre los Pop Rocks y el refresco. Algunos refrescos, como el refresco de naranja, contienen ácido cítrico, lo que puede darle a los Pop Rocks un sabor amargo. Otros refrescos, como la cerveza de raíz, contienen un sabor más dulce, lo que puede hacer que los Pop Rocks tengan un sabor más dulce.
En general, el tipo y sabor del refresco pueden afectar la reacción entre los Pop Rocks y el refresco, lo que resulta en diferentes efectos de efervescencia y experiencias de sabor.