Aquí está como:
* Reforma clerical: Reemplazó al Patriarcado, la posición más alta en la Iglesia Ortodoxa Rusa, con el Santo Sínodo, un Concilio de Obispos designados por el zar. Esto efectivamente colocó a la iglesia bajo el control del estado.
* Secularización de tierras de la iglesia: Confisció gran parte de la tierra de la iglesia, que había sido una fuente importante de riqueza y poder. Esta transferencia de tierras al estado ayudó a financiar sus ambiciosas reformas y proyectos.
* Control sobre las citas de la iglesia: Obtuvo el control sobre el nombramiento de obispos y otros funcionarios de la iglesia de alto rango. Esto le permitió garantizar la lealtad de la Iglesia y evitar cualquier desafío potencial para su autoridad.
* Restricción de la influencia de la iglesia: Limitó el papel de la iglesia en la vida pública, restringiendo su influencia en la educación y otros aspectos de la sociedad. También introdujo regulaciones destinadas a controlar el monasticismo.
* Promoción de la influencia occidental: Alentó la adopción de ideas y prácticas de Europa occidental, que a menudo se enfrentaban con los valores ortodoxos tradicionales. Esto condujo a una disminución en la influencia cultural de la iglesia.
Es importante tener en cuenta que Peter the Great no fue directamente hostil a la iglesia ortodoxa rusa. Lo vio como una herramienta crucial para mantener el orden social y promover su visión para una Rusia modernizada. Incluso patrocinó instituciones religiosas y participó activamente en las ceremonias de la iglesia. Sin embargo, estaba decidido a asegurarse de que la iglesia permaneciera subordinada al estado.
Al implementar estas medidas, Peter el Grande redujo significativamente el poder y la autonomía de la Iglesia Ortodoxa Rusa. Esto le permitió solidificar su propia autoridad e implementar sus ambiciosas reformas sin enfrentar una importante oposición religiosa.