Sin embargo, se sabe que estableció una escuela de navegación en Sagres, Portugal, en el siglo XV. Esta escuela, que no era una institución formal, sino más bien un centro de aprendizaje y experimentación, jugó un papel crucial en el desarrollo de la exploración marítima portuguesa. Atrajo a académicos, navegadores, cartógrafos y constructores navales que trabajaron juntos para mejorar las técnicas náuticas y diseñar mejores barcos.
Entonces, aunque el Príncipe Henry no asistió a una escuela, se le atribuye el establecimiento de una escuela de navegación, que fue crucial para la era de la exploración.