El primer uso exitoso del acero en un puente colgante fue en 1818, cuando se construyó el puente colgante de Menai en Gales. Se utilizó acero para los eslabones de la cadena porque era mucho más resistente que el hierro y podía soportar una carga de peso mayor.
Vías del ferrocarril
Los primeros carriles de acero se instalaron en la década de 1850. Eran más duraderos que los rieles de hierro y podían soportar el mayor peso de locomotoras y trenes.
Edificios
El acero se utilizó cada vez más en la construcción de edificios a finales del siglo XIX. La Torre Eiffel, terminada en 1889, es uno de los ejemplos más famosos del uso del acero en la arquitectura.