Michael Jackson es ampliamente considerado como uno de los mejores bailarines de todos los tiempos, conocido por sus icónicos movimientos de baile y su innovadora coreografía. Revolucionó el mundo de la danza con sus técnicas distintivas, como el moonwalk, el backslide y el agarre de la entrepierna, que siguen siendo imitadas por bailarines de todo el mundo. El baile de Jackson se caracterizó por su estilo suave y sin esfuerzo, coordinación impecable y presencia cautivadora en el escenario. Pudo combinar a la perfección varios estilos de danza, incluidos jazz, ballet, hip-hop y contemporáneo, creando un vocabulario de danza único y cautivador. El baile de Jackson jugó un papel crucial en su ascenso al estrellato y solidificó su estatus como el "Rey del Pop".