1. Planificar - Identificar y definir el problema u oportunidad de mejora. Reúna datos y analice la situación actual para comprender la causa raíz del problema.
2. Hacer - Implementar la solución propuesta a pequeña escala para probar su efectividad y recopilar más datos.
3. Comprobar - Evaluar los resultados de la prueba y compararlos con los resultados esperados. Determine si la solución está funcionando según lo previsto y logrando los resultados deseados.
4. Actuar - Si la prueba tiene éxito, estandarizar la solución e implementarla a mayor escala. Si la prueba no tiene éxito, identifique qué salió mal y repita el ciclo nuevamente con una solución revisada.
El círculo de Deming es un proceso cíclico, lo que significa que puede repetirse continuamente para mejorar continuamente los procesos, productos y servicios. Es una herramienta valiosa para empresas y otras organizaciones que buscan lograr el éxito a largo plazo y mantener una cultura de mejora continua.
Aquí hay una representación visual del círculo de Deming:

Beneficios del círculo de Deming:
* Mejora los procesos, productos y servicios identificando y eliminando las causas fundamentales de los problemas.
* Promueve una cultura de mejora continua y anima a los empleados a participar activamente en el proceso de mejora.
* Ayuda a las organizaciones a adaptarse a las condiciones cambiantes del mercado y las demandas de los clientes.
* Mejora la satisfacción y fidelidad del cliente.
* Reduce el desperdicio y la ineficiencia.