Quienes creen que Ono es malvada señalan su supuesto papel en la ruptura de los Beatles, así como su comportamiento manipulador hacia John Lennon. También la acusan de ser líder de una secta y de abusar de sus hijos.
Aquellos que creen que Ono no es mala argumentan que es simplemente una artista incomprendida que ha sido atacada injustamente por los medios. Señalan su trabajo como activista por la paz y sus donaciones caritativas como prueba de su buen carácter. También argumentan que ella fue una influencia positiva para Lennon y que lo ayudó a convertirse en una persona más cariñosa y caritativa.
En última instancia, si Yoko Ono es malvado o no es una cuestión de opinión. No existe un consenso claro sobre esta cuestión y ambas partes pueden presentar argumentos válidos.