Si bien la película y la novela son ficticias, se basan en elementos de historias carcelarias de la vida real y de las experiencias de los reclusos a mediados del siglo XX. Pearce, el autor de la novela, cumplió condena en una prisión de Florida y se inspiró en sus propias observaciones e interacciones con otros reclusos.
El personaje de Luke Jackson es una combinación de varios prisioneros de la vida real que mostraron resiliencia, desafío y negativa a adaptarse al opresivo sistema penitenciario. La descripción que hace la película de las duras realidades de la vida carcelaria, las luchas de los prisioneros y la dinámica de poder entre los reclusos y los guardias de la prisión resonaron tanto en el público como en la crítica, convirtiendo a "Cool Hand Luke" en un clásico del cine estadounidense.