Réquiem por un sueño (2000) es una película de drama psicológico dirigida por Darren Aronofsky y basada en la novela homónima de 1978 de Hubert Selby Jr. La película sigue las vidas de cuatro personajes estrechamente entrelazados en Brooklyn, cada uno de los cuales se involucra en el abuso de drogas. con consecuencias trágicas.
La trama
Harry Goldfarb (Jared Leto)
Harry es un joven drogadicto que vive con su madre, Sara (Ellen Burstyn). Sueña con convertirse en un exitoso traficante de drogas y ganar suficiente dinero para comprarle una casa junto al agua a su madre. Sin embargo, su adicción a las drogas rápidamente se sale de control y comienza a perder todo lo que le importa.
Marion Silver (Jennifer Connelly)
Marion es la novia de Harry y también es adicta a las drogas. Quiere limpiarse y comenzar una nueva vida, pero Harry la empuja constantemente de regreso al mundo de las drogas.
Tyrone C. Love (Marlon Wayans)
Tyrone es el mejor amigo de Harry y también es adicto a las drogas. Lleva años vendiendo drogas y está intentando ganar suficiente dinero para sacar a su novia, Lisa (Jaime King), de la prostitución. Sin embargo, su adicción a las drogas finalmente lo lleva a la ruina.
Sara Goldfarb (Ellen Burstyn)
Sara es la madre de Harry y es viuda. Se siente sola y deprimida y encuentra consuelo en la televisión. Se vuelve adicta a las pastillas para adelgazar y a las anfetaminas, y su salud mental se deteriora rápidamente.
La tragedia de la adicción
Réquiem por un sueño es una mirada poderosa e inquebrantable a los efectos devastadores de la adicción a las drogas. La película muestra cómo la adicción puede destruir vidas, familias y comunidades. Es una advertencia que advierte sobre los peligros del consumo de drogas y la importancia de buscar ayuda antes de que sea demasiado tarde.
Aclamación de la crítica
Réquiem por un sueño recibió elogios de la crítica tras su lanzamiento. La película fue elogiada por sus poderosas actuaciones, su inquebrantable retrato de la adicción a las drogas y su elegante cinematografía. La película fue nominada a dos premios de la Academia, a la Mejor Actriz de Reparto (Ellen Burstyn) y al Mejor Montaje.
Un clásico de culto
Desde entonces, Réquiem por un sueño se ha convertido en un clásico de culto y se considera una de las películas más poderosas jamás realizadas sobre la adicción a las drogas. La película es una visita obligada para cualquiera que quiera comprender los efectos devastadores del consumo de drogas.