En George Orwell's *Diecinueve ochenta y cuatro *, la sociedad es un régimen totalitario donde los individuos no tienen libertad, incluida la libertad de elegir su trabajo. El partido controla todos los aspectos de la vida, incluida la economía, y asigna empleos basados en sus propias necesidades y mecanismos de control.
En este contexto, es poco probable que las mujeres puedan elegir trabajar en el "pornosec" (un término que implica una industria como la pornografía). La parte probablemente usaría dicho campo para promover su control, propaganda o vigilancia.
Por lo tanto, si las mujeres trabajen en tal campo en *diecinueve ochenta y cuatro *, probablemente estaría bajo el estricto control del partido, no por su propio deseo o libertad de elección. Esto se alinearía con la representación de la novela de una sociedad donde se suprimen los deseos y autonomía individuales.
Es crucial recordar que * diecinueve ochenta y cuatro * es una obra de ficción, y el mundo distópico de la novela es una historia de advertencia sobre los peligros del totalitarismo.