En la escena final, los soldados se preparan para rendirse y el oficial al mando expresa un sentimiento de decepción e ira. Cree que la guerra es innecesaria y que ha causado un sufrimiento y una destrucción inmensos. A pesar de su decepción, el comandante reconoce la valentía y determinación de sus soldados.
La conclusión de la guerra subraya la inutilidad y la tragedia de la guerra, así como los sacrificios realizados por los soldados que luchan en ella. La descripción que hace Pirandello de la guerra resalta el sufrimiento, las pérdidas y la devastación que trae consigo, dejando a los lectores con una profunda sensación de los horrores y las consecuencias de la guerra.