El poder de Abigail se basa en varios factores. En primer lugar, es una mujer joven y hermosa que utiliza su apariencia física a su favor. Sabe que los hombres de la ciudad se sienten atraídos por ella y utiliza esto a su favor para conseguir que hagan lo que ella quiere. Por ejemplo, convence a John Proctor para que tenga una aventura con ella, y luego usa esta aventura para chantajearlo para que la ayude a encubrir su papel en los juicios de brujas.
En segundo lugar, Abigail es una actriz experta que puede convencer fácilmente a la gente de su sinceridad e inocencia. Es capaz de llorar a voluntad y parecer aterrorizada y vulnerable. Esto hace que sea fácil para la gente creer que ella está diciendo la verdad cuando acusa a otros de brujería.
En tercer lugar, a Abigail le ayuda el hecho de que la gente de Salem vive en una época de gran miedo y paranoia. Están preocupados por los nativos americanos que viven en las afueras de su ciudad, y también por los cambios religiosos que se están produciendo en Inglaterra. Esto los hace más susceptibles a las afirmaciones de Abigail, porque están ansiosos por encontrar a alguien a quien culpar de sus problemas.
Abigail Williams es una figura poderosa en The Crucible porque es capaz de manipular a los demás y jugar con sus miedos e inseguridades. Utiliza su apariencia física, sus habilidades interpretativas y el clima imperante de miedo y paranoia a su favor para conseguir lo que quiere.