En el abrazo de la familia, el amor encuentra su camino,
Un refugio sagrado, donde realmente yacen los corazones.
A través de mares tormentosos y días soleados,
Juntos, siempre estaremos de pie, pase lo que pase.
Como hilos de oro, nuestras historias se entrelazan,
Una sinfonía de almas, divinamente alineadas.
La risa resuena, las lágrimas encuentran liberación,
En los brazos de la familia encontramos la paz eterna.
Oh familia, el ancla que permanece firme,
A través de pruebas y triunfos, compartimos ganancias dichosas.
Su presencia es un consuelo, una luz guía,
Iluminando los caminos, brillando cada vez más.
A lo largo del viaje de la vida, valoremos cada latido,
Honrando el legado que nos hace completos.
En el abrazo de la familia, nunca estamos separados,
Por siempre entrelazados, atados en nuestros corazones.