Respuesta:
Pregúntele a uno de los guardias:"Si le preguntara al otro guardia qué puerta conduce al cielo, ¿qué diría?"
Aquí está la lógica detrás de esta pregunta:
* Si le preguntas al guardia honesto, te dirá correctamente lo que diría el guardia mentiroso, que es la puerta al infierno.
* Si le preguntas al guardia mentiroso, te dará la respuesta contraria a lo que diría el guardia honesto, que también es la puerta al infierno.
Por lo tanto, independientemente de a qué guardia preguntes y si es honesto o mentiroso, la respuesta que recibas siempre será la puerta al infierno. Entonces, la otra puerta debe ser la puerta al cielo.