* Practicar técnicas de relajación. Las técnicas de relajación, como la respiración profunda, el yoga y la meditación, pueden ayudar a reducir los niveles generales de estrés y hacer que sea menos probable que se estremezca.
* Identifique sus factores desencadenantes. ¿Cuáles son las cosas que desencadenan tu respuesta de estremecimiento? Una vez que sepa cuáles son sus factores desencadenantes, puede empezar a evitarlos o desarrollar estrategias para afrontarlos.
* Desensibilízate. Expóngase gradualmente a las cosas que desencadenan su respuesta de estremecimiento de una manera segura y controlada. Esto puede ayudarle a aprender que la amenaza percibida no es tan peligrosa como pensaba y a reducir su respuesta de estremecimiento.
* Busca ayuda profesional. Si su respuesta de estremecimiento es grave o interfiere con su vida, es posible que desee buscar ayuda profesional de un terapeuta o consejero. Pueden ayudarle a identificar las causas subyacentes de su respuesta de estremecimiento y a desarrollar mecanismos de afrontamiento.
A continuación se ofrecen algunos consejos adicionales que pueden ayudarle a reducir su respuesta de estremecimiento:
* Sé consciente de tu lenguaje corporal. Cuando sientas que empiezas a estremecerte, intenta relajar los músculos y mantener el cuerpo quieto.
* Concéntrate en tu respiración. Respire lenta y profundamente y trate de concentrarse en la sensación del aire que entra y sale de sus pulmones.
* Recuerda que estás a salvo. Dígase a sí mismo que la amenaza percibida no es tan peligrosa como pensaba y que está a salvo.
* Buscar apoyo de los demás. Si tiene dificultades para afrontar su respuesta de estremecimiento, hable con un amigo, familiar o terapeuta.
Con la práctica, puedes aprender a reducir tu respuesta de estremecimiento y vivir una vida más segura y relajada.