La música heavy metal no tiene ninguna conexión inherente con la adoración al diablo. Si bien algunas bandas utilizan imágenes satánicas para generar impacto o expresión artística, la gran mayoría de las bandas y fanáticos de heavy metal no tienen inclinaciones religiosas de una forma u otra. El heavy metal es simplemente un género musical y, como tal, no existe un mensaje o filosofía inherente. El contenido de cualquier canción de heavy metal depende del artista y no refleja necesariamente las creencias de los fans.