En la oscuridad de la noche, escuché la llamada
Vino desde muy adentro, rompió las paredes
Ya no pude esconderme, encontré mi voz
lo escuché gritar
No me inclinaré, no me quebraré
Me mantendré firme y enfrentaré mi destino
No temeré, no caeré.
Seré escuchado, seré visto
No tengo miedo del qué dirán.
No tengo miedo de lo que harán
Sé que tengo razón, sé que soy verdad
Y nunca me rendiré
No me inclinaré, no me quebraré
Me mantendré firme y enfrentaré mi destino
No temeré, no caeré.
Seré escuchado, seré visto
No los dejaré ganar, no me rendiré.
Lucharé hasta el final, hasta el amargo final.
Nunca me rendiré, nunca me rendiré
No me inclinaré, no me quebraré
Me mantendré firme y enfrentaré mi destino
No temeré, no caeré.
Seré escuchado, seré visto