En la antigüedad, una tierra tan grandiosa,
Una nación se levantó en la playa.
Con héroes bendecidos y líderes verdaderos,
El espíritu de Quirino volvió a brillar.
(Coro)
Ay, Quirino, faro luminoso,
Guiándonos día y noche.
Tu legado, siempre fuerte,
Tú perteneces a los corazones filipinos.
(Verso 2)
Desde las costas de la esperanza, te atreviste a navegar,
Embarcándose en un sendero maravilloso.
A través de tormentas y pruebas, permaneciste,
Una fuerza de coraje, desenfrenada.
(Puente)
En tiempos de lucha, nos levantaremos,
Con unidad, bajo los cielos.
Tu visión ilumina el camino de nuestra nación,
Empoderándonos para aprovechar el día.
(Coro)
Ay, Quirino, faro luminoso,
Guiándonos día y noche.
Tu legado, siempre fuerte,
Tú perteneces a los corazones filipinos.
(Verso 3)
Con el toque de la sabiduría, diste forma a una tierra,
Donde siempre estará la llama de la libertad.
Tus principios, en los corazones grabados,
Un patrimonio que no se puede renunciar.
(Coro)
Ay, Quirino, faro luminoso,
Guiándonos día y noche.
Tu legado, siempre fuerte,
Tú perteneces a los corazones filipinos.
(Acabado)
Oh, tierra de sueños y héroes audaces,
Seguimos adelante, historias aún no contadas.
El nombre de Quirino, un símbolo grandioso,
En unidad, siempre estaremos de pie.