En un convento escondido,
Las monjas residen con gracia cada día.
Pero en el fondo anhelan vagar,
Más allá de las paredes de su hogar.
(Coro)
Entonces, conduzcamos, conduzcamos, conduzcamos.
Sal a la carretera, escapa de la colmena.
Monjas en un viaje, oh, tan grandioso,
La aventura llama, ellos lo entenderán.
(Verso 2)
Sor María con un mapa en la mano,
Guía el camino hacia tierras desconocidas.
La hermana Leo se pone al volante.
Una monja que sabe pedalear.
(Verso 3)
Sor Ana, la navegante,
Mapea el curso, un creador de rutas.
Hermana Kate, una verdadera pasajera,
Canta con el ánimo en alto.
(Coro)
Entonces, conduzcamos, conduzcamos, conduzcamos.
Sal a la carretera, escapa de la colmena.
Monjas en un viaje, oh, tan grandioso,
La aventura llama, ellos lo entenderán.
(Puente)
A través de caminos sinuosos y vistas panorámicas,
Se ríen, aprecian los placeres del momento.
Desde ciudades bulliciosas hasta escenas rurales,
Las monjas experimentan los brillos de la naturaleza.
(Verso 4)
Se detienen para ayudar a un amigo varado.
Un acto de bondad, una mano amiga.
La unión forma una hermandad,
La fuerza del amor, puro y bueno.
(Coro)
Entonces, conduzcamos, conduzcamos, conduzcamos.
Sal a la carretera, escapa de la colmena.
Monjas en un viaje, oh, tan grandioso,
La aventura llama, ellos lo entenderán.
(Verso 5)
Al regresar, el convento está cerca,
Sus corazones estaban llenos, sus recuerdos claros.
Las monjas abrazan las lecciones enseñadas,
A través de este impulso, se buscan sus almas.
(Coro)
Entonces, conduzcamos, conduzcamos, conduzcamos.
Sal a la carretera, escapa de la colmena.
Monjas en un viaje, oh, tan grandioso,
La aventura llama, ellos lo entenderán.
(Acabado)
A través del viaje, obtuvieron una nueva vista,
Un mundo de maravillas, un mundo tan brillante.
Y con sus corazones cambiados para siempre,
Abrazarán el viaje de la vida reorganizado.