La introducción es la primera parte de una canción que te derriba porque establece el tono y la atmósfera para el resto de la canción. Puede ser cualquier cosa, desde una simple melodía hasta un arreglo complejo, pero es lo que llama tu atención y te hace querer seguir escuchando.
Una gran introducción puede hacerte sentir feliz, triste, emocionado o cualquier cosa intermedia. Puede transportarte a otro momento o lugar, o simplemente puede darte ganas de bailar. Haga lo que haga, una gran introducción es esencial para una gran canción.
A continuación se muestran algunos ejemplos de excelentes introducciones:
* "Good Vibrations" de los Beach Boys comienza con un theremin, que es uno de los primeros instrumentos electrónicos que crea un sonido inquietante y etéreo. Esta introducción prepara el escenario para el resto de la canción, que trata sobre un hombre enamorado de una mujer que está fuera de su alcance.
* "(I Can't Get No) Satisfaction" de los Rolling Stones comienza con un riff de guitarra simple y repetitivo que crece y crece hasta llegar a un crescendo. Esta introducción captura perfectamente la frustración y la ira de la letra de la canción, que trata sobre un hombre que está cansado de que lo den por sentado.
* "Strawberry Fields Forever" de los Beatles comienza con una melodía psicodélica de ensueño que crea una sensación de asombro y misterio. Esta introducción marca perfectamente el tono para el resto de la canción, que trata sobre un hombre que busca sentido a su vida.
Estos son sólo algunos ejemplos de grandes introducciones. Hay muchas otras canciones que tienen excelentes introducciones y cada una tiene su propia forma única de derribarte. Así que la próxima vez que escuches música, presta atención a la introducción. Quizás sea la mejor parte de la canción.