Los cantos corales tienen una larga historia que se remonta a los primeros días de la música occidental. Fueron desarrollados originalmente como una forma para que los monjes y monjas acompañaran sus oraciones y meditaciones. Con el tiempo, los cantos corales se volvieron más elaborados y comenzaron a utilizarse en procesiones y ceremonias religiosas más importantes.
Hoy en día, los cantos corales todavía se utilizan en muchas tradiciones religiosas de todo el mundo. También son populares en una variedad de entornos seculares, como conciertos, escuelas y eventos comunitarios.
Algunos de los ejemplos más famosos de cantos corales incluyen el canto gregoriano, el canto bizantino y el canto anglicano.