Esto podría provenir de cualquier lugar:una experiencia personal, una poesía, una melodía que escuchas en tu cabeza, la observación de la naturaleza o un evento actual.
2. Escribe la letra.
Aquí es donde expresas tus pensamientos y sentimientos sobre el tema elegido. No te preocupes por la rima o la métrica al principio; siempre puedes revisar eso más tarde.
3. Elige una progresión de acordes.
Esta es la base de la armonía de tu canción y puede ayudarte a crear un estado de ánimo o sentimiento específico. Hay muchas progresiones de acordes diferentes para elegir, así que experimenta hasta que encuentres una que te guste.
4. Escribe una melodía.
Esta es la parte que la gente cantará, así que asegúrese de que sea pegadiza y memorable.
- Empieza tarareando una melodía que se ajuste al tono de la letra y a la progresión de acordes.
- Experimenta con diferentes melodías hasta que encuentres una que te guste.
- Graba tu melodía para no olvidarla.
5. Arregla tu canción.
Aquí es donde decides qué instrumentos tocarán cada parte de la canción y cómo encajarán todos juntos. También puedes agregar efectos como reverberación o retardo para mejorar el sonido.
6. Graba tu canción.
Si tiene acceso a un estudio de grabación, esta es una excelente manera de obtener sonido de calidad profesional. Pero también puedes grabar tu canción en casa utilizando equipos relativamente económicos.
7. Mezcla tu canción.
Este es el proceso de equilibrar los niveles de los diferentes instrumentos y efectos, y crear un sonido general cohesivo.
8. Domina tu canción.
Este es el paso final en el proceso de grabación e implica aplicar ciertos ajustes y modificaciones para crear la mejor calidad de sonido posible.
9. Comparte tu canción.
¡Ahora es el momento de compartir tu creación con el mundo! Sube tu canción a plataformas de streaming como Spotify y Apple Music, y promuévela en las redes sociales.