Si bien algunos países pueden tener leyes estrictas de derechos de autor que prohíben la descarga no autorizada de música, otros pueden permitirla en determinadas circunstancias, como para uso personal o con fines educativos. En muchos países, existen alternativas legales disponibles para descargar música, como comprar la música directamente a los artistas o a través de plataformas de transmisión de música autorizadas.
Generalmente es recomendable seguir las leyes y regulaciones de su jurisdicción para evitar posibles consecuencias legales. Si no está seguro de la legalidad de una acción en particular, se recomienda consultar a un profesional del derecho o buscar orientación de fuentes oficiales.