* Falta de documentación. Muchos de los primeros artistas de blues no sabían leer y escribir y, como resultado, no tenían contratos escritos con sus compañías discográficas. Esto dificultaba que las compañías discográficas llevaran la cuenta de lo que se les debía a los artistas.
* Contratos injustos. Incluso cuando los primeros artistas de blues tenían contratos, a menudo eran injustos con los artistas. Los contratos normalmente otorgaban a las compañías discográficas una gran parte de las ganancias y, a menudo, no exigían que las compañías discográficas pagaran regalías a los artistas.
* Segregación. Las leyes Jim Crow de la época dificultaban que los artistas afroamericanos viajaran y actuaran, lo que limitaba su potencial de ingresos. Las compañías discográficas no estaban dispuestas a invertir en artistas negros ni a firmar contratos lucrativos con ellos debido a preocupaciones sobre el racismo y la violencia.
* Falta de recursos. La industria discográfica todavía estaba en sus primeras etapas y las compañías discográficas no tenían los recursos para enviar pagos de regalías a todos sus artistas.
Como resultado de estos factores, muchos de los primeros artistas de blues no recibieron las regalías que se les debían. Esto les dificultaba ganarse la vida con su música y contribuía a la pobreza que muchos de ellos experimentaban.