1. Prepara la partitura:
Coloque la partitura sobre una superficie plana y bien iluminada para garantizar una buena visibilidad. Asegúrese de que la música no tenga arrugas ni pliegues que puedan obstruir su vista.
2. Ajustar la configuración de la cámara:
Configure su cámara para tomar imágenes claras y nítidas. Asegúrese de que la resolución de la cámara sea suficiente para capturar las notaciones musicales en detalle. Ajuste el enfoque, la iluminación y la exposición de la cámara para obtener una imagen bien iluminada.
3. Capturar imágenes:
Tome varias fotografías de cada página de la partitura. Capture la página completa, asegurándose de que todas las notaciones musicales, incluidas notas, símbolos y marcas, sean visibles en la imagen.
4. Organizar imágenes:
Guarde las imágenes capturadas en una carpeta dedicada en su dispositivo o computadora. Nombra las imágenes sistemáticamente para que sean fáciles de encontrar y acceder.
5. Revisa las imágenes periódicamente:
Revise las imágenes capturadas periódicamente para reforzar su memoria de la partitura. Estudie las imágenes, centrándose en las notaciones, ritmos y otros detalles específicos.
6. Práctica:
Combina esta técnica de memorización fotográfica con la práctica de música tradicional. Reproduzca la música mientras hace referencia a las imágenes, reduciendo gradualmente su dependencia de ellas a medida que mejora su memoria musical.
7. Pon a prueba tu memoria:
Pon a prueba periódicamente tu memoria cubriendo ciertas secciones de la música y reproduciéndolas sin mirar las imágenes. Esto le ayudará a medir su progreso en la memorización.
Recuerde, esta técnica es un complemento a los métodos tradicionales de memorización de música. La práctica constante y la repetición siguen siendo esenciales para desarrollar una memoria musical sólida.