Ígor Stravinsky:
Stravinsky fue un compositor de origen ruso considerado uno de los compositores más influyentes del siglo XX. Sus composiciones, incluidas "The Firebird" (1910), "Petrushka" (1911) y "Le Sacre du Printemps" (1913), revolucionaron la música con su uso innovador del ritmo, la armonía y la orquestación. Estas obras le valieron el reconocimiento internacional y lo consolidaron como una figura destacada del movimiento de vanguardia. Stravinsky continuó traspasando los límites musicales a lo largo de su vida, explorando varios estilos y formas musicales.
Serguéi Prokófiev:
Prokofiev, otro compositor ruso, ganó prominencia a principios del siglo XX con su distintivo estilo musical. Sus primeras obras, como "Piano Concerto No. 1" (1911) y "Scythian Suite" (1915), mostraron su enfoque innovador de la melodía, la armonía y la orquestación. La música de Prokofiev se caracteriza por su vitalidad rítmica, melodías líricas y audaces progresiones armónicas. Compuso numerosas óperas, ballets, sinfonías, conciertos y otras obras instrumentales, dejando un impacto duradero en el mundo de la música clásica.
Tanto Stravinsky como Prokofiev hicieron importantes contribuciones al desarrollo de la música de vanguardia en el siglo XX. Sus obras innovadoras desafiaron las convenciones musicales tradicionales y ampliaron las posibilidades de expresión musical, dejando una huella indeleble en la evolución de la música clásica.