"No tengo miedo" (¿Dónde estás, amado?)
"Por favor" (Súplica)
"Perla del Río Pasig"
"Rosas Pandan"
"Por ti"
"Mi País" (Mi País)
Estas composiciones muestran el dominio y la comprensión de Francisco Santiago de las tradiciones y emociones musicales filipinas, lo que lo convierte en una figura icónica de la música filipina.