Cuando pasas el arco sobre las cuerdas del violín, se crean vibraciones que producen las notas musicales. El arco está formado por cientos de crines que, cuando se pasan por las cuerdas, hacen que vibren hacia adelante y hacia atrás. Los pelos del arco están fuertemente tensados, lo que permite que el arco produzca un sonido consistente cuando se pasa por las cuerdas.
Crea fricción que pone la cuerda en movimiento
El arco ayuda a tirar de las cuerdas del violín, provocando una fricción que las pone en un estado de vibración. Cuanta más presión se aplica sobre el arco, más fuertes se vuelven las vibraciones y más fuerte es el sonido producido por el instrumento.
Controla el tono
El arco también ayuda a controlar el tono del sonido producido por el instrumento. Al tensar el arco a una velocidad o presión diferente y con distintos grados de fuerza, se pueden tocar diferentes notas en el violín.
Crea timbre y dinámica
El arco también ayuda a crear diferentes tipos de timbre y dinámica al tocar el violín. El timbre se refiere a la calidad y el color del sonido, mientras que la dinámica se refiere al volumen o intensidad del sonido producido. Al variar la velocidad, la presión y el ángulo del arco, el músico puede crear diferentes timbres y dinámicas con el sonido del violín.