Colocación de la embocadura :El expansor palatino se asienta en el paladar, lo que afecta la colocación de la boquilla y la embocadura del clarinete. Es posible que el jugador tenga que ajustar la posición o los ángulos de sus labios para encontrar una embocadura cómoda y efectiva con el expansor palatino en su lugar.
Flujo de aire y resistencia :La presencia del expansor palatino puede afectar el flujo de aire y la resistencia al soplar en el clarinete. El músico puede experimentar una sensación diferente o requerir más esfuerzo para producir un sonido consistente.
Colocación de los dedos :El expansor palatino también puede interferir con la colocación de los dedos en las teclas del clarinete. Las teclas pueden sentirse diferentes bajo los dedos o requerir una coordinación más precisa.
Comodidad y resistencia :Usar un expansor palatino durante períodos prolongados puede resultar incómodo. Es posible que se requieran descansos más frecuentes durante las sesiones de clarinete para minimizar las molestias y mantener la resistencia.
Práctica y Adaptación :Los clarinetistas con expansores palatinos probablemente necesitarán tiempo para practicar y adaptarse a los cambios en su forma de tocar el instrumento. La práctica regular puede ayudarles a desarrollar nueva memoria muscular y superar los desafíos iniciales.
Consulta :Es recomendable consultar a un educador musical, instructor de clarinete o especialista dental familiarizado con el expansor palatino específico que se utiliza para recibir orientación y recomendaciones sobre cómo tocar el clarinete con el dispositivo colocado.