Nocturnos: Chopin escribió 21 nocturnos, piezas breves y de ensueño para piano solo. Se caracterizan por sus melodías fluidas y ricas armonías y, a menudo, evocan una sensación de anhelo o nostalgia. Algunos de los nocturnos más famosos incluyen el Nocturno en mi bemol mayor, op. 9, núm. 2, el Nocturno en si bemol menor, op. 9, núm. 3, y el Nocturno en do sostenido menor, op. 27, núm. 1.
Estudios: Los 27 estudios de Chopin exigen ejercicios técnicos para piano solo. A menudo se las considera algunas de las piezas para piano más difíciles jamás escritas y han sido interpretadas y estudiadas por pianistas de todos los niveles de experiencia. Algunos de los estudios más famosos incluyen el Estudio en do mayor, op. 10, n.° 1, el Estudio en la bemol mayor, op. 10, núm. 10, y el Estudio en do menor, op. 25, núm. 12.
Preludios: Los 24 preludios de Chopin son piezas breves y contrastantes para piano solo. A menudo se utilizan como ejercicios de calentamiento, pero también son obras de arte musicales por sí solas. Algunos de los preludios más famosos incluyen el Preludio en do menor, op. 28, núm. 20, el Preludio en mi menor, op. 28, núm. 4, y el Preludio en la mayor, op. 28, núm. 7.
Sonatas: Chopin escribió tres sonatas para piano, cada una de las cuales es una obra sustancial en tres o cuatro movimientos. La Sonata n.° 2 en si bemol menor, op. 35, es la más famosa y está considerada una de las mejores composiciones de Chopin. Las otras dos sonatas son la Sonata nº 1 en do menor, op. 4, y la Sonata n.º 3 en fa menor, op. 58.
Conciertos: Chopin escribió dos conciertos para piano y orquesta. El Concierto n.° 1 en mi menor, op. 11, es el más famoso de los dos y está considerado uno de los conciertos para piano más bellos y técnicamente exigentes jamás escritos. El Concierto n.° 2 en fa menor, op. 21, es menos conocido pero también es un trabajo sustancial y desafiante.
Mazurcas: Chopin escribió 58 mazurcas, que son danzas tradicionales polacas para piano solo. Se caracterizan por sus ritmos animados y melodías populares y, a menudo, evocan una sensación de nostalgia por la tierra natal de Chopin. Algunas de las mazurcas más famosas incluyen la Mazurka en La menor, op. 17, n.° 4, la mazurca en si bemol mayor, op. 24, n.° 1, y la Mazurca en fa sostenido menor, op. 63, núm. 2.
Valses: Chopin escribió 19 valses para piano solo. Se caracterizan por sus melodías fluidas y ritmos elegantes, y han sido disfrutados tanto por bailarines como por oyentes durante generaciones. Algunos de los valses más famosos incluyen el Vals en mi bemol mayor, op. 18, n.° 1, el vals en la bemol mayor, op. 34, n.° 1, y el Vals en do sostenido menor, op. 64, núm. 2.
Estas son sólo algunas de las muchas obras notables de la música de Chopin. Su música todavía se interpreta y disfruta ampliamente hoy en día, y sigue siendo considerado uno de los más grandes compositores de todos los tiempos.