Los receptores de A/V suelen tener varios componentes, como un amplificador, un sintonizador y un preamplificador, los cuales requieren espacio. Para que quepa todo, los receptores deben ser relativamente grandes.
Amplificador
La sección del amplificador es la parte de un receptor que consume más espacio, ya que requiere cantidades significativas de disipador de calor para evitar el sobrecalentamiento. La sección del amplificador es responsable de amplificar las señales de audio entrantes, por lo que cuanto más grande sea el receptor, más potente puede ser el amplificador.
Sintonizador
La sección del sintonizador es responsable de recibir señales de radio y convertirlas en señales de audio. Los sintonizadores requieren espacio para sus circuitos de RF, así como para los distintos interruptores y botones utilizados para seleccionar estaciones.
Preamplificador
La sección de preamplificador es responsable de amplificar las señales de audio de bajo nivel provenientes del amplificador y de proporcionar control de tono y otros procesamientos. Los preamplificadores también requieren espacio para sus circuitos, así como para las tomas de entrada y salida que se utilizan para conectarse a otros componentes.
Otras características
Además de los componentes principales enumerados anteriormente, los receptores A/V suelen incluir funciones adicionales como una etapa de fono, procesamiento de sonido envolvente y conmutación HDMI. Todas estas características requieren circuitos adicionales, lo que aumenta el tamaño del receptor.
Conclusión
En general, el gran tamaño de los receptores de audio se debe a los múltiples componentes y características que deben acomodar. Si bien hay algunos receptores compactos disponibles, los modelos más grandes ofrecen más potencia y funciones, lo que los convierte en la opción preferida de muchos entusiastas del audio.