1. Utilice un archivo de audio de alta calidad. En primer lugar, asegúrese de que los archivos MP3 que esté utilizando sean de la mayor calidad posible. Cuanto mayor sea la velocidad de bits de un archivo MP3, mejor será la calidad del sonido.
2. Convierta sus archivos MP3 al formato WAV. Los archivos WAV son archivos de audio sin pérdidas, lo que significa que no pierden calidad cuando se convierten. Para convertir MP3 a WAV, puede utilizar una herramienta de software gratuita como Audacity.
3. Utilice un editor de vídeo de alta calidad. Al importar sus archivos WAV a Windows Movie Maker, asegúrese de seleccionar la opción "Alta calidad" en la configuración de importación. Esto ayudará a garantizar que se conserve la calidad del audio.
4. Renderiza tu vídeo con la mayor calidad posible. Cuando renderice su video en Windows Movie Maker, seleccione la opción de calidad "Mejor". Esto ayudará a garantizar que se conserve la calidad del audio y el vídeo.
5. Sube tu vídeo a YouTube en alta calidad. Al cargar su video a YouTube, seleccione la opción "Alta calidad" en la configuración de carga. Esto ayudará a garantizar que se conserve la calidad del audio y el vídeo.
Siguiendo estos pasos, podrás subir la banda sonora de tu juego a YouTube sin perder calidad de sonido.