Tratamiento acústico se centra en controlar el sonido dentro del estudio, mientras que la insonorización se centra en evitar que el sonido escape o entre en el estudio.
Tratamiento acústico Por lo general, se logra mediante el uso de materiales absorbentes, como espuma acústica, fibra de vidrio y lana mineral, para reducir la cantidad de sonido que se refleja en las superficies duras y crear un sonido más equilibrado y natural. Estos materiales se pueden colocar estratégicamente en las paredes, el techo y el suelo del estudio para absorber frecuencias no deseadas y evitar ecos y reverberaciones.
Insonorización, por otro lado, implica el uso de materiales y técnicas para bloquear o reducir la transmisión del sonido a través de paredes, puertas, ventanas y otras aberturas del estudio. Esto se puede lograr mediante el uso de paneles insonorizados, vinilo de carga masiva (MLV) y otros materiales que tengan alta densidad y baja pérdida de transmisión del sonido. La insonorización es importante para evitar que el sonido se escape fuera del estudio y moleste a los demás, así como para evitar que el ruido exterior interfiera con las grabaciones.
El tratamiento acústico y la insonorización son consideraciones importantes al diseñar y construir un estudio, y las técnicas y materiales específicos utilizados dependerán de las necesidades específicas del estudio y del tipo de grabación que se realizará.