El uso de ropa contemporánea en las obras de Shakespeare se debió a varias razones, una de las cuales fue el hecho de que las compañías teatrales no tenían los recursos financieros para crear vestuarios extensos para sus actores. Además, el público isabelino habría estado familiarizado con la vestimenta que vestían los actores, lo que les ayudó a suspender su incredulidad y sumergirse en la obra.
Si bien los actores de las obras de Shakespeare vestían ropa contemporánea, en general se seguían ciertas convenciones. Por ejemplo, los actores masculinos normalmente vestían jubones, medias y capas, mientras que las actrices vestían farthingales, vestidos y faldas. Además, los actores pueden usar accesorios u otros accesorios para ayudar a distinguir a sus personajes, como una corona para un rey o una espada para un soldado.
A pesar de que el vestuario de las obras de Shakespeare no era históricamente exacto, seguía siendo eficaz para transmitir las identidades y roles de los personajes al público. La habilidad de los actores y la habilidad de los actores crearon una experiencia teatral rica y vívida que transportó al público a los mundos de las obras de Shakespeare.