En una obra de Shakespeare, ¿qué acto es siempre el clímax?
El acto III, también conocido como la "crisis", a menudo se considera el clímax de una obra de Shakespeare. Por lo general, marca el punto de inflexión en la trama y, a menudo, está lleno de conflictos intensos y mucho drama. Muchas de las obras de Shakespeare siguen una estructura de cinco actos, y el acto III suele situarse en el medio de la obra, lo que lo convierte en un punto fundamental de la historia.