Los roles secundarios pueden variar mucho en términos de complejidad e importancia. Algunos personajes secundarios pueden tener un tiempo sustancial en pantalla o en el escenario y contribuir significativamente a la historia, mientras que otros pueden tener papeles más pequeños con apariciones limitadas pero aún así desempeñan un papel vital en la narrativa.
Los actores secundarios suelen ser intérpretes experimentados y talentosos que aportan profundidad y matices a sus papeles, incluso si no son las figuras centrales. Ayudan a crear un mundo rico y creíble para la audiencia y contribuyen al éxito general de la producción.