A continuación se muestran algunos ejemplos de comportamientos de actuación:
1. Agresión Física:Participar en peleas físicas, golpes, lanzamiento de objetos o cualquier forma de violencia física hacia otros.
2. Destrucción de propiedad:Dañar o destruir pertenencias intencionalmente, como romper objetos o destrozar propiedad.
3. Robar:Tomar algo sin permiso o robar por emoción más que por necesidad.
4. Infracción de reglas:ignorar o violar constantemente reglas, regulaciones o normas sociales, a menudo con una actitud de oposición.
5. Comportamiento impulsivo:actuar según impulsos o deseos impulsivos sin considerar las consecuencias, como tomar decisiones imprudentes o participar en actividades riesgosas.
6. Comportamientos autolesivos:Participar en acciones que causan daño físico a uno mismo, como cortarse, quemarse o abusar de sustancias.
7. Abuso de sustancias:recurrir a las drogas, el alcohol u otras sustancias para afrontar la angustia o los conflictos emocionales, que a menudo conducen a la adicción.
8. Comportamiento sexual inapropiado:Participar en actos sexuales que son inapropiados para la edad o que involucran actividades no consensuales.
9. Delincuencia:Cometer actos ilegales o delitos penales, como hurto, vandalismo o allanamiento de morada.
10. Trastorno de oposición desafiante (ODD):un patrón de comportamiento persistentemente desafiante y argumentativo hacia figuras de autoridad, como padres o maestros.
Actuar mal puede ser un síntoma de problemas emocionales o psicológicos subyacentes, incluidos problemas de ira, trastornos de conducta, trastornos del estado de ánimo o trastornos relacionados con traumas. Es importante abordar las causas subyacentes y brindar apoyo e intervención a las personas que adoptan conductas actuantes para ayudarlas a desarrollar mecanismos de afrontamiento saludables y gestionar sus emociones de una manera más constructiva.