Argumento específico: Symphonie fantastique no es sólo una colección de movimientos musicales abstractos, sino que cuenta una historia específica. Berlioz proporcionó un programa detallado que explica la narrativa detrás de cada movimiento, permitiendo a los oyentes seguir el viaje emocional del protagonista del compositor.
Títulos descriptivos: Cada movimiento de la sinfonía lleva un título descriptivo que da pistas de la progresión de la historia. Por ejemplo, el primer movimiento se titula "Rêveries – Passions" (Ensueños – Pasiones), el segundo es "Un bal" (Un baile) y el tercero es "Scène aux champs" (Escena en los campos). Estos títulos ofrecen pistas musicales sobre los eventos y emociones que se desarrollan en cada movimiento.
Representación Musical de Emociones: El uso que hace Berlioz de colores orquestales y temas musicales representa eficazmente diversas emociones y eventos mencionados en el programa. Por ejemplo, en el cuarto movimiento, titulado "Marche au supplice" (Marcha al cadalso), el ritmo pesante, la siniestra melodía y la pesada instrumentación crean una sensación de pavor y tragedia.
Personajes y escenas específicas: El programa presenta personajes particulares, como la mujer amada y el alter ego del protagonista, y los sitúa en escenas descriptivas como un baile, un entorno pastoral y un aquelarre de brujas. Estos elementos realzan el aspecto narrativo de la sinfonía.
Unidad a través de leitmotivs: Berlioz emplea temas musicales, o leitmotiv, para representar ideas o personajes específicos a lo largo de la sinfonía. Por ejemplo, la idea fija, una melodía recurrente, simboliza a la mujer amada y su presencia en la mente del protagonista.
Al entrelazar estrechamente la música con una narrativa extramusical, Symphonie fantastique difumina los límites entre la música puramente abstracta y formas más explícitas de narración musical. Estas características programáticas lo hacen destacar como uno de los ejemplos definitorios de música programada en la era romántica.