Juntas, estas dos palabras significan que algo se hizo sin ningún pensamiento o preparación previa. Esto podría ser cualquier cosa, desde una decisión espontánea hasta un evento completamente inesperado.
A continuación se muestran algunos ejemplos de cosas que podrían no estar planificadas ni ensayadas:
- Un viaje repentino a la playa.
- Una fiesta de baile espontánea.
- Una propuesta que no fue planeada de antemano.
- Una fiesta de cumpleaños sorpresa.
- Un accidente automovilístico
Los eventos no planificados y no ensayados pueden ser emocionantes, aterradores o cualquier cosa intermedia. Pero una cosa es segura:¡siempre son memorables!