* Sueños. César daba gran importancia a los sueños, creyendo que podían contener mensajes de los dioses. Según se dice, la víspera de su asesinato, César soñó que volaba sobre las nubes, lo que interpretó como una señal de su muerte inminente.
* Augurios. César también creía firmemente en los presagios o señales del mundo natural que podían predecir el futuro. Uno de los presagios más famosos asociados con César fue la aparición de un cometa en el cielo en el año 44 a.C. Este cometa fue ampliamente interpretado como una señal de la inminente caída de César, y se dice que incluso el propio César quedó conmocionado por su aparición.
* Astrología. César también estaba interesado en la astrología, el estudio de las posiciones y movimientos de los cuerpos celestes como medio para comprender y predecir los asuntos humanos. Hizo que su astrólogo de la corte, Artimidoro, le elaborara su horóscopo para determinar el mejor momento para lanzar sus diversas campañas militares.
* Prácticas supersticiosas. Además de estas creencias, César también participó en una serie de prácticas supersticiosas para protegerse de cualquier daño. Estas prácticas incluían usar amuletos, hacer sacrificios a los dioses y consultar con adivinos.