"¡Pero, suave! ¿Qué luz entra por aquella ventana?
Es el oriente, y Julieta es el sol." (Acto 2, Escena 2)
En estas líneas, la repetición de los sonidos consonantes "s" y "t" crea un flujo de sonido suave y melodioso. El sonido "s" se puede escuchar en palabras como "suave", "a través", "sol" y "este", mientras que el sonido "t" está presente en palabras como "luz", "qué", "ventana". , ", "este" y "Julieta". Esta repetición realza la eufonía de las líneas, aumentando su calidad lírica.
La eufonía juega un papel importante a la hora de realzar el impacto emocional de la escena y transmitir la belleza y la pasión del momento. Ayuda a crear una atmósfera armoniosa, cautivando al público y sumergiéndolo en el mundo de la obra.