Las direcciones escénicas pueden ser explícitas o implícitas. Las instrucciones explícitas proporcionan instrucciones específicas sobre lo que deben hacer los actores, como "Entrar por la izquierda" o "Cruzar hacia la ventana". Las direcciones implícitas, por otro lado, son menos específicas y pueden requerir más interpretación por parte de los actores. Por ejemplo, una dirección escénica que dice "Él la mira con nostalgia" no especifica exactamente cómo el actor debe expresar su anhelo, pero sí transmite una sensación general de lo que el actor debe transmitir a la audiencia.
Además de proporcionar instrucciones para los actores, las direcciones de escena también pueden servir como guía para el director, el diseñador de vestuario, el diseñador de iluminación y otros miembros del equipo de producción. Ayudan a garantizar que la producción sea fiel a la visión del dramaturgo y que todos los aspectos de la producción se unan para crear una experiencia teatral cohesiva y atractiva.