1. Apartheid y desigualdad racial: Al crecer en Sudáfrica durante la era del apartheid, Fugard fue testigo de primera mano del sistema opresivo y su impacto en las vidas de los sudafricanos negros. Aporta esta perspectiva a "Boesman y Lena", profundizando en las duras realidades de la segregación racial y la desigualdad económica. La obra retrata las luchas de los personajes principales, clasificados como "de color" bajo el apartheid, mientras luchan contra la pobreza, el desempleo y la marginación social.
2. Intersección de cuestiones sociales: Las experiencias de Fugard también le permitieron explorar las intersecciones de raza, clase y género. En "Boesman y Lena", retrata la vida de la clase trabajadora, centrándose en la difícil situación de Lena, quien enfrenta dificultades adicionales como mujer en una sociedad patriarcal. La obra arroja luz sobre las complejas barreras sociales y económicas que enfrentan las personas de entornos desfavorecidos, destacando las disparidades entre los privilegiados y los marginados.
3. Empatía por los marginados: La comprensión de Fugard de la vida de las comunidades marginadas proviene de sus propias experiencias mientras crecía en Port Elizabeth, una ciudad a menudo caracterizada por la pobreza y la segregación. Aporta un sentido de empatía y compasión a su interpretación de Boesman y Lena, dos personas que son resistentes a pesar de sus terribles circunstancias. La obra desafía al público a enfrentar la injusticia y la desigualdad social y a considerar la humanidad y la dignidad de quienes están atrapados en sistemas opresivos.
4. Simbolismo: La experiencia de Fugard en teatro le permite utilizar el simbolismo y la alegoría de manera efectiva en sus obras. En "Boesman y Lena", el viaje emprendido por los personajes principales representa las luchas más amplias de los individuos marginados que navegan en una sociedad racialmente dividida. El encuentro de los personajes con una joven llamada "Outa" también sirve como símbolo de esperanza y resiliencia en medio de la adversidad.
5. Comentario político: Las obras de Fugard a menudo se ven como formas de comentario político, que expresan su crítica al régimen del apartheid y su impacto en la sociedad sudafricana. "Boesman y Lena" transmite un fuerte mensaje político sobre los efectos deshumanizadores del apartheid y la urgente necesidad de un cambio social.
En resumen, los antecedentes y las experiencias personales de Athol Fugard en Sudáfrica durante la era del apartheid tienen una profunda influencia en los temas, personajes y contexto de su obra "Boesman y Lena". Sus conocimientos sobre la desigualdad racial, las luchas de clases y la difícil situación de las comunidades marginadas dan forma a la narrativa de la obra y la convierten en un poderoso comentario sobre las realidades sociales y políticas de Sudáfrica durante esa época.