Media máscara:
Una de las características más llamativas de la apariencia de Erik es la media máscara que cubre su rostro, generalmente hecha de cuero blanco y negro, y que se lleva atada a la cabeza. Esta máscara oculta gran parte de la parte superior de su rostro, incluida la nariz, la boca y uno de los ojos.
Deformidad:
Se describe que Erik tiene una deformidad o desfiguración facial grave. Los detalles de esta desfiguración quedan ambiguos, pero a menudo se representa en adaptaciones e ilustraciones como un crecimiento carnoso, un defecto de nacimiento o una cicatriz que distorsiona sus rasgos. Esta deformidad es una de las razones por las que se esconde detrás de la máscara y vive una vida solitaria.
Fuerza física y agilidad:
A pesar de su deformidad y el consiguiente aislamiento, Erik es físicamente fuerte y ágil. Es capaz de navegar con facilidad por los pasadizos ocultos de la Ópera de París y muestra habilidades notables en determinadas tareas físicas.
Constitución muscular:
En algunas interpretaciones del personaje, Erik es retratado con un físico musculoso y poderoso, que contrasta con sus deformidades. Este aspecto refuerza su dualidad como presencia amenazadora y víctima.
Fantasma:
La naturaleza misteriosa y esquiva de Erik se destaca por su apodo, "El fantasma de la ópera". A menudo se le describe como un espectro o una figura parecida a un fantasma, que ronda la ópera y sigue siendo una presencia enigmática a pesar de sus atributos físicos.