Forma y estructura :El Globe Theatre era un edificio circular de madera con un patio al aire libre. El escenario se proyectaba hacia el patio y el público estaba de pie o sentado alrededor del escenario en tres niveles de galerías de madera.
Techo y dosel de paja :El techo del Globo cubría sólo la parte interior del teatro, dejando la zona central abierta al cielo. Un dosel de paja se extendía sobre el escenario, brindando refugio a los actores.
Escenografía :El escenario del Globe era una plataforma elevada sin telón e incluía dos áreas principales:un escenario delantero y un escenario trasero. El escenario delantero era donde tenía lugar la mayor parte de la acción, y el escenario trasero se utilizaba para escenas que requerían privacidad, como dormitorios o interiores.
Experiencia de la audiencia :El Globe Theatre ofreció varias opciones de asientos para su público. Groundlings, los más pobres de los asistentes, se encontraban en el patio abierto justo enfrente del escenario. Los clientes más ricos podían comprar asientos en las galerías, lo que proporcionaba mejores vistas de las actuaciones.
Iluminación natural :Como en la época isabelina no había iluminación artificial, las representaciones en el Globe Theatre se llevaban a cabo durante el día, cuando había luz natural. Esto influyó en el momento y la duración de las jugadas.
Flexibilidad :El diseño del Globe Theatre permitió flexibilidad en la puesta en escena. Los accesorios, la escenografía y las plataformas se podían mover y organizar fácilmente en el escenario, mejorando las posibilidades para diversas producciones teatrales.
Ambiente íntimo :El Globe Theatre tenía una capacidad relativamente pequeña, unas 3.000 personas. Esto creó un ambiente íntimo donde el público estaba cerca de los actores, mejorando la sensación de inmediatez y compromiso con las actuaciones.
Por el contrario, los teatros modernos suelen tener escenarios de proscenio, con el público sentado en filas frente al escenario. A menudo cuentan con elaborados sistemas de iluminación y sonido, y muchos tienen aire acondicionado y asientos cómodos. Estas diferencias en el diseño reflejan cambios en la arquitectura, la tecnología y las preferencias del público del teatro a lo largo de los siglos.