Las trampillas, que se encuentran con mayor frecuencia en escenarios o platós de cine o televisión, pueden ser motorizadas o operadas manualmente. Si se operan manualmente, generalmente tienen contrapeso para facilitar su elevación.
Las trampillas se pueden usar de múltiples maneras, incluido brindar acceso a los actores y artistas intérpretes o ejecutantes a las partes superiores del escenario o al escenario de manera no visible, ocultar a los personajes cuando hacen sus entradas y salidas para no perturbar el flujo de la actuación, y creando momentos inesperados para una audiencia.
Las trampillas son populares en actos de magia e ilusión, ya que pueden hacer que los artistas aparezcan o desaparezcan en un instante, creando un momento de sorpresa y asombro.