1. Dibuja las cabezas.
Dibuja dos círculos, uno para cada espía aproximadamente a dos tercios de la parte superior de tu página y aproximadamente a un tercio de la página desde los lados izquierdo y derecho.
2. Añade detalles faciales.
Dibuja el ala de un sombrero en la parte superior de cada círculo. Añade agujeros para los ojos, con un pequeño arco y una línea larga y puntiaguda, a cada lado del centro. Dibuja un pequeño cuadrado para la nariz y una curva ancha para la boca de cada espía.
3. Dibuja los cuerpos.
Para cada espía, dibuja un triángulo isósceles con su parte superior casi a la altura de los agujeros para los ojos y su base en la parte inferior de la página. Redondea los bordes exteriores del triángulo y agrega muescas para las manos cerca del centro de cada lado.
4. Añade brazos y manos.
Dibuja 3 muescas puntiagudas para los dedos de cada mano y dibuja líneas curvas para los brazos.
5. Añade piernas y pies.
Dibuja 2 muescas para los dedos de cada pie y dibuja líneas dobladas para las piernas.
6. Añade las gabardinas y los sombreros.
Para cada espía, dibuja una línea larga y curva delante del cuerpo para la gabardina. Dibuja un triángulo, con la parte inferior a la altura de los ojos y la parte superior apuntando hacia afuera, para las solapas del abrigo. Dibuja un sombrero de ala ancha para cada espía.
7. Añade los toques finales.
Dale a uno de los espías una pistola y al otro un cuchillo. También puedes añadir otros objetos, como maletines o binoculares, para hacer más interesante la escena.
8. Colorea a tus espías.
Tradicionalmente, un espía puede ser negro y el otro espía puede ser blanco o de otro color.