Una de las primeras formas de clave de sol fue la clave de sol, que inicialmente se encontraba en la segunda línea del pentagrama. Esto indicó que la nota G debería tocarse en esa línea. Más tarde, la clave de sol ascendió gradualmente hasta su posición actual en la segunda línea desde la parte superior del pentagrama, convirtiéndose en la clave de sol.
El desarrollo de la clave de sol fue un esfuerzo colectivo durante muchos siglos, que involucró contribuciones de varios músicos, teóricos y compositores que contribuyeron a la evolución de la notación musical. Por tanto, no se atribuye a un único inventor o creador.