Los perros de exposición suelen ser de raza pura, lo que significa que han sido criados a partir de padres de la misma raza. Esto asegura que tengan las características físicas y temperamentales deseadas. Además de ser criados a partir de líneas de sangre de calidad, los perros de exposición también reciben un entrenamiento y aseo exhaustivos. Este entrenamiento les ayuda a comportarse bien en el ring y a presentarse de la mejor manera posible.
El proceso de preparación de un perro de exposición para una competición puede llevar mucho tiempo y ser caro. Sin embargo, para muchas personas, las recompensas de tener y mostrar un perro exitoso bien valen el esfuerzo.