* Subjetividad: Lo que es "lo peor que hacer" es altamente subjetivo. Depende de los valores, creencias y prioridades individuales. Algunas personas pueden encontrar viendo dibujos animados a 18 frívolos, mientras que otras pueden verlo como una diversión inofensiva o una forma de desestresarse.
* Falta de evidencia: No hay evidencia científica que demuestre que ver dibujos animados a los 18 años es dañino. No es como consumir algo peligroso o participar en actividades ilegales.
* Diferencias individuales: Las personas maduran a diferentes tasas. Algunos jóvenes de 18 años pueden estar listos para un entretenimiento más "adulto", mientras que otros aún disfrutan de los dibujos animados. No hay un estándar universal para lo que es apropiado a cierta edad.
Es importante recordar que juzgar los intereses o pasatiempos de alguien generalmente se basa en sesgos personales, no hechos objetivos.